sábado, agosto 19, 2006

Incredulidad

Desisto de ti, querida patria llamada amor.
Quizás nunca me consideraste una ciudadana digna.
Tal vez fueron mis errrores, que sé yo!!
Fui ilusa, creí en el firme suelo que pisaba junto a ti
pero en el embargo de mis ilusiones, las palabras caían como pajaros;
pájaros que se precipitaban violentamente al mar, para volar en el azul de los ojos,
y hundirse en la muerte de mi ser.
Te deseo como el hijo que añora el regazo de su madre,
pero todo es tan translúcido, que ya no sé si debo seguir
y aún asi sigues ahi, golpeando mi cabeza cada vez que me ves en el suelo,
mientras sé que otro cadáver ocupa mi espacio esta noche.
Eres ilusión, la más pura y bella de todas...
pero todo es demaciado falso para mi, tú eres la belleza en el sol
derretida por tu falso perfume, que me sabe a veneno.
Eres falsa, pero eres lo que tengo...
hace mucho tiempo, quizás de toda la vida.